Entre espezas neblinas
y gotas de rocio.
tus pistilos pestañean
para quitar la humedad
de tus cienes
Tu aroma se vuelve fuerte
como al humedecer
sus labios una doncella.
Amaneces libre entre
las hierbas
que fortalece tu sutileza
en el crepusculo.
Y te vuelves a cerrar
por las noches guardando
esas gotitas de amor
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